Hoy, 9 de marzo, comienza la cuenta atrás, 40 días y 40 noches de espera para la semana más larga del año, la más esperada, la Semana Santa. Comienza una larga espera que para muchos ya comenzó en el momento en que se dio por finalizada la pasada, con ese sentimiento de nostalgia con el que añoramos esta bendita semana y deseamos que llegue lo más pronto posible.
Hoy oficialmente se inicia esa espera, que aún se nos hará larga. Por delante queda un largo camino de disfrute, ilusión, ganas y multitud de vivencias que para cada uno serán inolvidables. Un largo tiempo de ensayos en el cual esperemos que el tiempo nos respete. Un largo tiempo que nos dejará un pregón que pasará a la historia, que reflejará vivencias y que plasmará en verso y prosa aquellos sentimientos e impresiones que despiertan en nosotros durante esa bendita semana. La ilusión de aquel que vestirá por primera vez la túnica de nazareno. La preparación de un quinario, un besamanos o cualquier otro culto, en el que cada hermandad pondrá todo su empeño para que luzca el máximo posible. Tendremos un Via+Crucis que será único, como cada año, y que será el preludio de la Semana Grande. Cada día de la Cuaresma nos llegará ese olor cautivante y magnífico del azahar y el incienso. Y llegarán también los traslados de las imágenes, que nos situarán bajo el pórtico de la Semana Santa, como preludio del comienzo.
Señoras y señores, cofrades todos, quedan 40 días y 40 noches para la Gloria, para una semana que cuenta el tiempo al revés pero...¡Que 40 días y que 40 noches!
Hoy oficialmente se inicia esa espera, que aún se nos hará larga. Por delante queda un largo camino de disfrute, ilusión, ganas y multitud de vivencias que para cada uno serán inolvidables. Un largo tiempo de ensayos en el cual esperemos que el tiempo nos respete. Un largo tiempo que nos dejará un pregón que pasará a la historia, que reflejará vivencias y que plasmará en verso y prosa aquellos sentimientos e impresiones que despiertan en nosotros durante esa bendita semana. La ilusión de aquel que vestirá por primera vez la túnica de nazareno. La preparación de un quinario, un besamanos o cualquier otro culto, en el que cada hermandad pondrá todo su empeño para que luzca el máximo posible. Tendremos un Via+Crucis que será único, como cada año, y que será el preludio de la Semana Grande. Cada día de la Cuaresma nos llegará ese olor cautivante y magnífico del azahar y el incienso. Y llegarán también los traslados de las imágenes, que nos situarán bajo el pórtico de la Semana Santa, como preludio del comienzo.
Señoras y señores, cofrades todos, quedan 40 días y 40 noches para la Gloria, para una semana que cuenta el tiempo al revés pero...¡Que 40 días y que 40 noches!
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