Ayer, Domingo de Pregón. Hoy, Lunes de Pasión, 6 días para esa semana en la que, como dije en entradas anteriores, los sueños se cumplen y revolotean nuestras mayores ilusiones.
Así es, para todos nosotros la cuenta atrás va llegando a su fin y nos quedaremos con las vivencias irrepetibles de cada Cuaresma, que se repetirá un año más pero no será igualable a ninguna.
Llegará el Domingo de Ramos, día grande de la Semana Santa por excelencia, y con él comenzará este camino de ilusiones, algunos comienzan su andadura en esto de pasear Cofradías por tierras hispalenses, otros, aquí en Huelva seguirán paseando las de años anteriores, hablamos de Mutilados o de la Virgen del Rosario, entre otras Cofradías.
Pasará el Domingo de Ramos y nos plantaremos en el Lunes Santo, este año más especial si cabe. En la Plaza del Museo o en el barrio del Polvorín, más de uno vivirá intensamente la consecución de su sueño, ése ante el que ninguna duda cabe y que sólo puede ser de ellos...
La jornada del Martes Santo se presenta este año de forma única e irrepetible. Esta familia, casi al completo, podrá disfrutar de un paseo de categoría al Cristo de la Sangre, paseo que quedará grabado en nuestra memoria durante mucho tiempo porque nada mejor que poder disfrutar de lo que más nos gusta rodeado de amigos, sí señor.
El Miércoles Santo se presenta como otra jornada en la que los sueños se cumplen. Mientras muchos de nuestras "fatigas" pasean al Prendimiento, en la antigua Padre Andivia uno de los nuestros vivirá su primer Miércoles bajo Nuestra Señora de la Esperanza, ¡qué grande!
Jueves Santo, jornada que se viste de clasicismo y de sabor añejo. Allá en la Merced, habrá quién disfrute como nadie con su Señor de las Cadenas, buen tanque para pasear y gran estreno cuanto menos. Mientras tanto, en la Hermandad de la Oración muchos de nosotros disfrutarán con el andar del Señor de la Oración, mucha tela...
Pasado el Jueves Santo, llega la Madrugá: punto y aparte. Permitidme este atrevimiento, pero ésa noche seré yo quién viva la consecución de mi sueño, quién se sienta un privilegiado y quien verá cómo revolotean sus mayores ilusiones durante 8 horas... Todo esto no lo viviré de cualquier manera, sino en la mejor de las compañías, ellos sabes quiénes son, y con la gratitud de saber que más adelante, con el Señor de Huelva, uno de los grandes para mí también estará viendo cumplido su sueño.
Así podría seguir a lo largo de esta entrada, pero quizás ya ha quedado más que evidente que esta Semana Santa será muy especial para nosotros. No solamente para los que pasearemos Cofradías, sino también para aquellos de esta "familia" que todavía no lo hacen y saben que disfrutaremos por ellos.
Para todos ellos, de corazón, solamente deseo que el tiempo nos respete y nos deje disfrutar de una Semana Santa que quedará grabada en la memoria de muchos... ¡Que sean muchas!
Para todos los de esta familia.